Cinco tips para proteger las persianas de la humedad.
¿Sabías que dejar las persianas cerradas durante todo el invierno puede causar moho y hongos?
Te preguntas qué hacer para proteger las persianas si se han visto dañadas por la humedad. Pues bien! Esto sucede cuando se forma condensación en el interior del vidrio de la ventana durante un tiempo prolongado que conduce a la pudrición de la madera, la pintura descascarada y el moho.
¿Qué causa la condensación de las ventanas?
La condensación ocurre cuando el aire caliente entra en contacto con una superficie fría. Durante los meses más fríos, el aire caliente del interior de la casa entra en contacto con el vidrio enfriado por el clima frío del exterior. Es similar al espejo del baño que se empaña después de una ducha.
La condensación es muy común en ventanas antiguas o ventanas con vidrio de un solo panel porque no tienen esa barrera aislante que proporcionan las ventanas de doble panel.
Por suerte, hay medidas que puedes tomar que protegerán las persianas de la humedad y ayudarán a que duren muchos años más.
1. Reduce la humedad en el ambiente
Los baños y las cocinas tienen los niveles más altos de humedad en el hogar. Asegúrate de encender los ventiladores para permitir que el aire circule periódicamente. Esto puede ayudar a secar la condensación que se formó durante una ducha o mientras cocinas.
“Abre las persianas regularmente para permitir que fluya el aire, especialmente en ventanas difíciles como esquinas o ventanales. Usar un deshumidificador también puede eliminar la humedad del aire.”
2. Agrega una barrera aislante
¿Tiene ventanas de un solo panel? Intente usar una envoltura de plástico o un kit de aislamiento de ventanas para crear una bolsa de aire que limite la transferencia de aire frío. Esto también puede crear una barrera entre la humedad y la persiana, protegiendo aún más la tela.
3. Comprueba si hay fugas
Si puede entrar aire, también puede entrar humedad. Siente el aire que sopla por el lugar, sobre todo si hay mal tiempo. Aquí la recomendación es agregar remates a todos los espacios por donde se cuele el aire. En ocasiones cuando se instalan las ventanas de aluminio, se opta por sellar con silicón para que no se filtre el agua o el polvo que pueda entrar. Esto también ayuda a proteger las persianas en casa.
4. Distribuye las plantas pues producen humedad
¿Tienes muchas plantas cerca de una ventana? Las plantas pueden aumentar la humedad de una habitación, así que intenta extender las macetas con plantas distribuyendo entre varias ventanas o en varias habitaciones.
5. Evite que las persianas toquen el vidrio
Instalar persianas o cortinas aislantes puede ayudar a crear una barrera aislante entre la habitación y las ventanas. Pero asegúrate de instalar las persianas para que no toquen el vidrio. Para montajes interiores, esto significa verificar que tenga suficiente profundidad para que las persianas despejen la ventana. Para montajes exteriores, el uso de bloques espaciadores o soportes de proyección puede ayudar a empujar las persianas un poco más.
Bonus: Elige un estilo de persiana resistente a la humedad
Algunas persianas son más resistentes a la humedad y tienen menos probabilidades de deformarse cuando entran en contacto con la condensación.
Las persianas con telas plastificadas son más resistentes a la humedad. Por ejemplo, las persianas enrollables con telas traslucidas son ideales. Esto las hace adecuadas para espacios húmedos como baños y cocinas. También son fáciles de limpiar si se ensucian un poco.
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Foto por Milada Vigerova en Unsplash
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